En el terreno de la ingeniería química las mujeres se han ido abriendo un camino a lo largo de los años y aunque aún son muchos los hombres en esta disciplina, hay grandes ingenieras que han dejado huella en esta rama. Lo cierto es que cada vez la labor de profesionales como Beatrice Alice Hicks resulta inspiradora para las generaciones que se están formando.
La aplicación de la ingeniería química permite que el deseo por resolver un problema, se inmortalice en un ingenioso método que se aplica para soluciones posteriores. La notoriedad de esta ingeniera química y eléctrica se debe a una carrera profesional de notables exigencias y satisfactorios resultados.
Abrirse paso en el mundo de la ingeniería química de los años 40 fue posible para Beatrice Hicks gracias a la polivalencia de su preparación. Fue esto lo que la hizo resaltar a nivel industrial y corporativo.
Así fue el camino recorrido por Beatrice Hicks
Te relatamos a continuación los principales logros que esta ingeniera química ha ido alcanzando y sus principales aportaciones a la ingeniería química.
Western Electric
La empresa Western Electric sirvió a Beatrice Hicks como plataforma de desarrollo profesional y la ingeniera resultó ser un capital valioso en un momento en el que el gigante de innovaciones tecnológicas requería una modernización. Beatrice Hicks fue la primera mujer contratada para un cargo de ingeniería en Western Electric.
Osciladores de cuarzo
Sus investigaciones teóricas aventajaron los sectores de telefonía. La inserción del cuarzo como material para los osciladores es un avance de inmensa magnitud que la comunicación a larga distancia le debe a Beatrice Hicks. Su investigación inicial en densidad de materiales cobra peso al considerar sus logros profesionales.
Durante su tiempo en Western Electric, la ingeniera comenzó el camino que la llevaría a la que es considerada su aportación más valiosa. Cuando participó en la producción de tableros de control central, Beatrice Hicks dio con dos problemas claves de la industria: la medición mecánica y la necesidad de estandarizar los bienes ofrecidos al público.
Logros corporativos y Newark Control
Cuando su nombre se hacía más frecuente en las conversaciones de ingeniería química, Beatrice Hicks tuvo que atender unas necesidades familiares y tomar las riendas de la empresa metalúrgica Newark Control de su recién fallecido padre. Lejos de ralentizar su carrera, esta tragedia la hizo mucho más notable, siendo condecorada por diversas organizaciones académicas, industriales y civiles.
Aportaciones y patente, tecnología apta para el espacio
Al frente de la Newark Control, Beatrice Hicks desarrolló dispositivos sensores que alertaran de anomalías en el proceso industrial y elaboró el Modelo de Procedimientos para Control de Calidad. Habiendo resaltado en los aspectos técnicos y teóricos de la ingeniería química como profesión, Beatrice Hicks patentó el Escáner de Densidad Molecular. Su tecnología fue utilizada por la NASA para la realización de misiones espaciales. Cuando su relevancia personal era indiscutible, la ingeniera química con estudios en electricidad y física, se dedicó a la consultoría profesional y abogó por mayor presencia femenina en los centros de estudios de ingeniería.
Al comenzar la segunda guerra mundial, la industria estadounidense había enviado sus mejores técnicos a combatir. Mujeres como Beatrice Hicks dejaron claro que el progreso de una sociedad requiere determinación, disciplina e ingenio, tres atributos presentes en profesionales comprometidos con el conocimiento sin distinción alguna.